Los debates que se
realizan sobre el calzado de jogging minimalista* y maximalista** causan furor
en todo el mundo. En 2013, todas las compañías han seguido el ejemplo de la
tendencia minimalista. Las características de sus calzados se orientan
claramente hacia una mayor ligereza, más flexibilidad, menos altura del talón y
menos tecnología para controlar los movimientos del pie. Los grandes nombres de
la industria del calzado tienen ahora, sin excepción, una gama de calzado
llamada minimalista* o que tienen las
características del calzado minimalista*. Un número cada vez más importante de
compañías orientadas hacia el minimalismo ven la luz. El sector del mercado de
este tipo de calzado ha experimentado una ascensión fenomenal. En pocas
palabras, este tipo de calzado no ha estado nunca, en los últimos 30 años, tan
omnipresente.
Ciencia y calzado de carrera
A pesar de que el
procedimiento científico sea la mejor manera de validar la precisión de
nuestras prácticas, a menudo este no es muy concluyente. La dificultad de este
proceso, en coste y en tiempo, nos trae a cuenta gotas los estudios de calidad
que nos llevan a cambiar nuestras prácticas. Aunque las compañías tienen como
responsabilidad validar sus productos antes de ponerlos en el mercado, ningún
estudio publicado justifica la tecnología del calzado moderno en la prevención
de las lesiones en la carrera a pie. La ciencia nos da por el contrario algunas
pistas para reflexionar y nos precisa que las tecnologías “anti-pronadoras”, la
amortiguación y la elevación del talón integrados en el calzado no disminuyen
la incidencia de las lesiones y no aumentan la comodidad percibida. Además, el
calzado moderno maximalista nos cambia la biomecánica natural, por citar
algunos de los cambios que nos provoca podríamos decir que favorece el ataque
talón, produce una pérdida del alineamiento de la rodilla y una disminución de
la cadencia.
Debate y consenso
Todos se entienden
para decir que el pie descalzo y el calzado minimalista tienen unos efectos muy
positivos sobre el fortalecimiento del pie, el equilibrio y el rendimiento en
las carreras de resistencia; que el calzado protege contra el frío y las
superficies peligrosas; y que no hay razón para cambiar nuestro tipo de calzado
si no estamos lesionados, y que no deseamos mejorar el rendimiento. Por el
contrario, queda consensuar algunas cuestiones primordiales: ¿A quién se dirige
el minimalismo? ¿El minimalismo está recomendado sólo como una herramienta de
trabajo o para el conjunto de los entrenamientos?
Cambiar el calzado
Hacer la transición
hacia un calzado más minimalista comporta ciertos riesgos. Los tejidos
susceptibles de irritarse en el momento del cambio son los mismos tejidos que se
han fragilizado por el hecho de llevar un calzado maximalista: el gemelo, el
tendón de Aquiles y el pie. Con lo cual es esencial, para todo corredor que
haga esta transición, de ser progresivo y de escuchar los signos que le envía
su cuerpo.
Recomendación para el debutante y el niño
A la luz de los
conocimientos actualmente publicados, está claro que no hay razón para
prescribir calzado maximalista en los niños en desarrollo y en los adultos que
se inician en la carrera a pie. Incluso si el pie descalzo parece ser la mejor
manera de desarrollar una biomecánica “protectora” y de fortalecer nuestros
tejidos a largo plazo, su accesibilidad a menudo limitada nos da, en 2013, más
interés al calzado minimalista.
En conclusión, ¡recordar
que el calzado minimalista no es la panacea! La causa de las lesiones en la
carrera a pie se relaciona principalmente con una sobrecarga de nuestros
tejidos. Así que si estáis lesionados, preguntaros antes de nada: ¿he corrido
demasiado tiempo o demasiado deprisa sin respetar una buena progresión?
* calzado minimalista: calzado de menor grosor y más
flexible (con un índice TRC > 70%: http://www.laclinicadelcorredor.com/es/informacion-para-corredores/calzado-recomendado.php )
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calzado maximalista: calzado tradicional